la tranquilidad junto al danubio fue perfecta

ubicación maravillosa, desayuno delicioso

habitaciones algo calurosas

La falta de aire acondicionado en la habitación, pero el desayuno buffet es excepcional y la ubicación es conveniente.

desayuno buffet, buena ubicación, falta aire acondicionado.

La atención del personal fue excelente y la habitación amplia. Sin embargo, el aire acondicionado no funcionaba bien, lo que resultó incómodo.

Qué experiencia gastronómica! El desayuno, con su pan de queso fresco y opciones que te elaboran al momento, es de otro nivel. Además, el trato de Antonio fue excepcional, siempre atento a nuestras necesidades. Las instalaciones son modernas y mantenidas a la perfección.

Si bien la cena se nos complicó con un temporal que cerró el restaurante, una comida rápida ayudó. Además, el plato de ducha no drenaba bien, aunque el personal se ofreció a cambiarnos de habitación, preferimos quedarnos. Aun así, todo brilló en nuestra estadía.

El desayuno fue increíble, con opciones recién hechas y abundantes. La atención de Antonio fue super acogedora. Solo que el aire acondicionado no funcionaba muy bien. 😅

Nuestra estancia con amigos fue genial. La habitación era amplia y confortable, y el desayuno variado. Disfrutamos de la buena ubicación, cerca del metro, lo que facilitó nuestras salidas. Recomendamos visitar el Naschmarkt y caminar por Kärntner Strasse para disfrutar la ciudad.

Sin embargo, el aire acondicionado de la habitación no funcionaba bien, lo que hizo que las noches fueran un poco incómodas.

Disfrutamos mucho nuestra estadía. Antonio nos recibió en español, lo que hizo todo más acogedor. Las instalaciones son modernas y espaciosas, y el desayuno buffet tenía de todo. Aunque parecía lejos del centro, había buen transporte público y un supermercado justo enfrente.

Para los padres de familia estaría bien mejorar el servicio de lavandería.

La habitación era bastante amplia y cómoda, con un armario adecuado para nuestras pertenencias. La limpieza de la habitación se mantuvo a un nivel alto durante toda nuestra estancia. El desayuno era variado y hacía que cada mañana comenzara con energía. Tenían opciones como zumos y tres o cuatro tipos de quesos, lo que es un buen detalle. Además, la atención del personal fue realmente acogedora, especialmente de Antonio, que estaba siempre dispuesto a ayudarnos. La ubicación del hotel, aunque no está en el centro, se compensaba con la cercanía del transporte público que facilitaba los traslados.

El aire acondicionado no funcionó adecuadamente, lo que fue un inconveniente al tratar de descansar. me pareció que el Wi-Fi era un poco lento en momentos críticos.

El Wi-Fi era algo lento y el bar/lounge agradable para relajarse después de un día.

La habitación era amplia y cómoda, con buen aislamiento del ruido, así que dormimos genial. Las instalaciones están nuevas, lo que se nota en cada rincón. Me encantó que el desayuno tuviera opciones recién preparadas, pero a veces el WiFi se volvía un poco lento. En general, una experiencia positiva.

Una experiencia sorprendente en Viena

El desayuno cada mañana fue un festín con productos frescos, y el trato del personal siempre amable y dispuesto a ayudar. La habitación era tranquila y cómoda, perfecta para descansar después de explorar la ciudad. Recomiendo usar el transporte público, es muy accesible y eficiente.